domingo, 13 de noviembre de 2016

La gran Sinagoga Judía de Budapest.

La sinagoga vista desde el exterior.




En este último viaje, voy a empezar por el final. Porque me impactó conocer la segunda sinagoga judía del mundo, en tamaño, en su decoración y en la que se aprecian diferencias con otras sinagogas.
Esa mañana, partíamos de vuelta a España y nos quedaban libres hora y media desde la apertura de la puerta de la sinagoga y nuestra recogida del bus. Así que madrugamos un poco y nos subimos al autobús mi esposa y yo, claro. La mayoría se quedó en el hotel mirándose las caras. Como digo subimos al autobús, que por cierto es gratis para los mayores de 65 al igual que el resto de transportes públicos. Contamos cinco paradas y nos bajamos. Llovía. pero nos dio igual. Llegamos los primeros y las taquillas aun estaban cerradas. Esperamos viendo los alrededores.

El Patio del cementerio

Una casa enfrente, dentro del barrio judío



 Fuimos de los primeros. No podíamos perder tiempo. Los servicios de seguridad, unos policías y una mesa en la que abrían las mochilas. ¡Parecían de otro tiempo!. Entramos y directamente al cementerio y el precioso Árbol de la Vida, al que luego volveríamos, pues la salida " es por allí".
Volvimos sobre nuestros pasos para acceder a la puerta. Los hombres debíamos de taparnos la cabeza, simbolizando la necesidad de tener presente en todo momento que Dios está por encima de los hombres y las cosas y solo pretende que la cabeza no quede descubierta ante Dios. Yo tenía gorro pero pedí un solideo (Kipá en judío), para hacerme una foto. Era de papel y no se me sujetaba. Así que, continué con mi sombrero.

Una visión que deja sin palabras

Similar a la anterior, un poco mas centrada

La bimá



Y la primera  mirada fue impactante, pues es distinta. Se parece mas a una iglesia, ya que su disposición alargada, todos los bancos mirando hacia lo que sería el altar de una iglesia y que en este caso es la bimá, desde donde se lee la torá. Hasta con púlpitos elevados a ambos lados. Hay sitio para 2964 personas, de los cuales 1492 son para hombres y 1472 para mujeres. Su estilo es principalmente morisco, aunque combina también con toques bizantinos, románticos y góticos.

Realmente es bonita.


Otra cosa curiosa para una sinagoga es el órgano situado detrás de la bimá, un elemento extraño en una sinagoga  y que no puede ser tocado los sábados por un judío  por ser día de descanso y oración. El interior de la sinagoga está profusamente decorado, como si fuera una iglesia de la época. 


Un interior sumamente amplio ybonito

una mirada al techo

una perspectiva de los bancos. La disposición exacta a una iglesia cristiana

Lámapras, techo, columnas.

Alguien pone en duda la belleza de esta Sinagonga?

Dorados por doquier



Mármol, metal y madera fueron utilizados para decorar el templo. Y la verdad es que es precioso. Hasta el punto de que durante mucho tiempo fue conocida como la Catedral judía. Hay que tener en cuenta que, en líneas generales, las sinagogas suelen ser bastante más austeras.


Una mirada rápida al cementerio en el que reposan las vítimas

El arbol de la Vida. Una de las muchas fotos que me trajer.

Holas del árbol de la vida, donde se aprecian bien los nombres.


Salimos al patio de nuevo para ver el cementerio con fosas comunes, en las que enterraban a sus muertos, ya que el barrio judío fue convertido en un gueto. Los que no morían aquí era porque eran llevados a campos de exterminio.
Y como no, al salir, nos paramos ante El Árbol de la Vida, realizado en metal, tipo un sauce con el nombre de los asesinados en cada una de sus hojas. Un monumento a los caídos durante el holocausto.
Y con prisa. volvimos de nuevo en el bus hacia el hotel, para comenzar la vuelta.