Desde Punta Umbría y gracias a nuestra amiga Carmen, nos desplazamos de nuevo hasta la Ermita del Rocío, situada en Almonte, otro bello lugar de Huelva. Desde nuestra última visita hemos notado algunas diferencias en los accesos. La tarde era luminosa, soleada y tranquila. Coches y furgonetas aparcados, como siempre.
Lo primero fue echar un vistazo a la marisma, siempre atractiva |
Apenas había unas carrozas con caballos y algunos ponis aburridos. Quizás un exceso de luz. Nos acercamos a ver a la Virgen, y la encontramos hermosa y con poca gente alrdedor. Me llamaron la atención los dos carteles a ambos lados del altar mayor :" PROHIBIDO HACER FOTOS Y VÍDEOS". Pero las pocas personas que estábamos, parecíamos no verlos. ¡ Igual es que las fotos con los móviles no las consideran ni fotos ni vídeos !.
En el interior, pocos devotos. Algunos haciendo fotos, |
La puerta principal, desde dentro |
Puerta lateral con vistas a la marisma |
Las farolas, testigos mudos de el gentío y del silencio. |
Las grandes rejas de la puerta lateral |
En fín, nos tomamos unos minutos de meditación, hicimos las fotos correspondientes y salimos a disfrutar de los alrededores.
Y como ya comenzaba a declinar el sol, las pocas personas que había se fueron marchando. Desaparecíam coches, furgonetas, carrozas, ponis.Como en otras ocasiones, con esto se terminaba la visita. En esta ocasión dimos un paseo para ver las casas de las hermandades, algunas realmente bonitas.
Casa de la Hermandad de Moguer |
Casa de la Hermandad de Huelva |
Plaza con la imagen de la Virgen en el centro |
Casa de la Hermandad de Sanlucar de Barraneda |
Disfrutamos de la luz de la marisma, de un buen café y de una bonita puesta de sol. Tuvimos la suerte de asistir a la recogida de los caballos y ponis, lo que nos dió una ocasión de oro para las fotos.
Y las cigüeñelas ( himantopus himantopus), nos deleitaron con sus paseillos.
Cuando el rey sol desaparecía, el frescor de las fechas nos visitaba, así que era el momento de volver. Espero os gusten mis fotos
Y la luna observando desde su privilegiado lugar. |