Hace unas semanas tuve la suerte de ir a Tenerife. Tengo que reconocer que no recordé nada de la vez anterior, hace 18 años. Ni siquiera el Drago milenario. ¡qué le voy a hacer!. Se me debió de borrar el disco duro de mi cabeza en algun momento. Y lo tengo que creer porque tenemos fotos que así lo atestiguan.
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Hermosa rampa para acceder a la primera planta, frente a la entrada y a la que se accede desde el hall de entrada. |
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Hall de entrada desde el corredor superior. |
La verdad es que el hotel, a diez minutos andando del centro del Puerto de la Cruz, me resultó muy agradable, por sus espacios abiertos, sus espacios cerrados, la comida y la atención de sus empleados.
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Esta "cuestecita" nos llavana al puerto. Despues descubrimos otros accesos mucho mas cómodos. |
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En el puerto, la vendedora de pescado, pregonando su mercancía. |
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Una panorámica de la parte nueva del Puerto de la Cruz. Es una calle comercial al lado de la mar, que en estos momentos rugía con fuerza. |
Llegamos al aeropuerto del sur y nuestro destino era el norte. Y todos nos hemos preguntado el por qué de casi hora y media de viaje, cuando el aeropuerto del norte estaba a quince minutos del hotel.
¡cosas de los organizadores!. Porque, a la vuelta, más de lo mismo. Y como el avión saliá a las 8,30h. tuvimos que levantarnos a las 4,15h. Un día menos.
Pero lo importante era disfrutar de la isla , de sus temperaturas agradables, y de alguna de las imágenes del carnaval. Y la verdad, fue un poco de decepción, ya que esperaba otro tipo de comparsas, fiestas, disfraces...Pero hay que reconocer que los carnavales importantes son en Santa Cruz de Tenerife y el la Palma.
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Un bello paseo marítimo nos lleva sin darnos cuenta al complejo Costa Martiánez, bajo cuyas piscinas está instalado el casino, complejo dirigido por el gran artista César Manrique. |
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Una pequeña ermita al lado de la mar. Belleza en blanco y verde. |
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Vista de las pisconas del complejo Costa Martiánez |
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Construcción típica de la isla. |
Y la verdad es que no hizo sol y llovió en algunos momentos. Y no nos sorprendió porque ya lo habíamos visto en internet. Los metereólogos de hoy día se confunden poco. Pero pudimos disfrutar de las playas de arenas negras, de sus exhuberante vegetación y de sus ciudades, todo distinto a lo que estamos acostubrados. Y del "papa Teide" como ellos le llaman. Así que vimos: El Puerto de la Cruz, Santa Cruz, Icod de los Vinos, La Laguna, el Loro Parque, El Teide...Y quitando esta excursión, el resto lo hicimos en autobús como la mayor parte de los turistas. Es mucho mas barato y mucho mas instructivo. Pongo unas fotos pero, como sun muchas, divido el Puerto de la Cruz en dos posts.
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Un lugar de la costa |
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Paseo marítimo, escultura natural, sol, playa y agua |
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Otra mirada sobre los lagos Martiánez |
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Capricno escultórico al lado del Castillo |
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un restaurante desde el que se pueden ver sorpendentes vistas. |